CHIMALHUACÁN, Méx., 25 de mayo de 2019. – Este medio día familiares de víctimas de feminicidio se concentraron en las inmediaciones del corredor turístico “Guerrero Chimalli” para protestar por los feminicidos en la entidad, además de levantar una cruz rosa (símbolo de la lucha contra los feminicidios) que fue derribada a inicios de este mes, aunque los manifestantes indicaron que a comparación del año 2016, cuando Rosalba Pineda Ramírez -entonces alcaldesa- mandó a retirar las cruces con maquinaria pesada, en esta ocasión no se sabe quién retiró una de las dos cruces que se encuentran a un costado del canal de la compañía, en calle Vicente Guerrero, del barrio Xaltipac.

De acuerdo a los manifestantes, en 2018 se cometieron 106 feminicidios en el Estado de México, de los cuales 9 fueron en este municipio mexiquense , convirtiéndose en uno de los primeros lugares en feminicidios, citando la reciente publicación del periódico La Jornada.

“Cuando las familias acuden a las autoridades para pedir ayuda se enfrenta a todo un sistema en que estos gobernantes tratan de ocultar los feminicidios, las desapariciones de mujeres y niñas, criminalizan a las mujeres violadas y persiguen a los familiares, además de encubrir y proteger a los violadores y asesinos”.

A la convocatoria que hiciera Irinea Buendia, se sumaron los familiares de Giselle Garrido, una menor de 11 años de edad violada y asesinada el pasado 19 de enero, en el barrio San Lorenzo; el cuerpo de la menor fue encontrado ocho días después en un paraje de Coatepec, en el vecino municipio de Ixtapaluca. Los familiares acusaron de intimidación al actual alcalde priísta, Jesús Tolentino Román, pero el caso conmocionó a la población que se sumó rápidamente a las manifestaciones que iniciaron los familiares de la pequeña para tratar de localizarla.

Las omisiones de las autoridades locales y de la propia Fiscalía General de Justicia (FGJEM) han mantenido la fuerza de quienes protestan contra la crueldad hacía las mujeres y que a pesar de contar con una Alerta de Violencia de Género, no hay acciones de la autoridad.

Durante la manifestación se encontraban algunas personas en donde se levantaría la Cruz para resguardar el material que sería utlizado, sin embargo acusaron que una Unidad de la Policía Municipal de Chimalhuacán se acercó para amenazarlos.

“Pasaron aquí gritando que la tercera era la vencida, no pudimos ver el número económico de la unidad por que pasó muy rápido, pero los hago responsables si es que nos llega a pasar algo”, comento una joven quien por miedo prefirió no salir en cámara.

Por su parte Irinea Buendía reprochó los intentos de intimidación de parte de la autoridad municipal a quien recordó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación las ampara mediante el dictamen de Mariana Lima Buendia, un caso más que se suma a la larga lista de omisiones por parte de la Fiscalía General de Justicia Mexiquense.